El próximo domingo 28 de septiembre disputaré el primer objetivo de esta nueva temporada; los 10k de la multitudinaria Cursa de la Mercè.
Es la 36ª edición de esta prueba atlética. Una cursa que recorre las principales calles de Barcelona, y que simboliza el inicio de la temporada para muchos, y para otros el primer intento de asalto a su mejor marca personal.
Esta cursa la he corrido varias veces y la verdad es que me gusta mucho. El recorrido es rápido, aunque tiene un último kilómetro muy duro en el que se recorre gran parte de la Av. Paral·lel. Un último kilómetro cuesta arriba, donde si vas con las fuerzas justas se puede hacer interminable. Aún así, si llegas en un buen estado de forma y el clima lo permite, se puede hacer un gran registro.
En esta edición han aumentado el número de inscritos a 18.000. No me gusta mucho el tipo de cursa multitudinaria, ya que las salidas suelen ser complicadas. Y me quejo yo que salgo desde el primer cajón. No me quiero imaginar los de más atrás. Opino que es un peaje que vale la pena pagar ya que correr por las calles más emblemáticas de la ciudad no tiene precio.
El precio de inscripción de esta cursa es como el de temporadas anteriores; 5 Euros. Precio muy económico y raro de ver en la actualidad. Con la bolsa del corredor regalan la camiseta que podéis ver en la imagen que sigue, además de tres revistas, unas tiritas y una muestra de crema calentadora.
Mi objetivo para esta carrera es rendir bien. Quiero intentar vaciarme al máximo y tener buenas sensaciones. Parecen objetivos fáciles, pero no lo son. Tener la cabeza dispuesta a todo requiere su trabajo. Y tener buenas sensaciones es complicado; no siempre sale la carrera con la que soñamos.
¿Batir mi mejor registro de 34:04? Soy realista y se antoja complicado. En la anterior Cursa de Poble Nou hice 34:54 y recortar todos esos segundos en sólo dos semanas es casi imposible. Pero bueno, intentaré trabajar cada km al límite, y veremos qué sale. En el deporte todo puede ocurrir.
Hace nueve semanas que inicié la temporada, con bastante calma para hacer una buena pre-temporada. Aunque parece bastante tiempo tengo la sensación de estar verde, y si me comparo con anteriores ciclos de entrenamiento, todavía me falta algo de chispa.
Desde que terminara hace dos semanas la Cursa de Poble Nou, los entrenos han ido saliendo bastante bien. Las sensaciones son raras. Esta temporada estamos apostando por hacer menos kilómetros pero con mayor calidad. En las dos temporadas anteriores entrenaba los siete días de la semana, teniendo tres días fuertes. Algunos rodajes del resto de días me los tomaba con más calma para dar algo de aire al cuerpo. En esta temporada estoy descansando un día, pero no hay entreno fácil. En los días de calidad (series, fartleks, etc..) me siento más saturado y me cuesta muchísimo cumplir los ritmos, cosa que antes sufría también, pero no hasta el punto de ahora. El tiempo dirá si este nuevo método es bueno o no. De momento, y visto el rendimiento en Poble Nou, estoy bastante contento.
Esta semana estoy algo cansado por otras cosas no relacionadas con el correr. Los madrugones en el trabajo (4.45h) y un viaje exprés a Madrid para realizar unas prácticas en la Universidad, me han dejado agotado. Por eso, las sensaciones no son muy buenas.
Esto es mi vida. El correr es mi pasión, pero no es lo que me da de comer. Así que sólo me queda que adaptarme. No hay más. Me encantaría poder recuperar mejor los entrenos que hago; vivir más tranquilo, dormir más cantidad de horas, y que siempre fueran por la noche. Pero eso es imposible. No me quejo, sólo insisto en que como muchos de vosotros, además de correr tengo bastantes otras cosas que atender. Ahí radica el mérito del corredor popular; sacar el tiempo de debajo de las piedras.
Y con esto llego a la Cursa de la Mercè. Ni más ni menos. Con la ilusión de seguir creciendo como corredor, y de seguir aprendiendo.
Para el domingo contaré con la compañía de mi hermano Javi. Si yo tengo una vida agitada, mi hermano se lleva la palma. Pero este es mi blog, no voy a entrar a explicar sus cosas. Sólo hago una pequeña mención para justificar una bajada en su rendimiento. Estoy seguro que cuando se despeje un poco todo, volverá a estar en su mejor versión.
Ya os contaré qué tal va.
¡Un saludo a tod@s y gracias por seguir mi blog!
Carlos, lo ultimo que se pierde no es la esperanza, si no la ilusión. No pierdas nunca la ilusión.