El próximo 21 de febrero disputaré el Maratón de Sevilla, una carrera que alberga el campeonato de España de maratón en esta edición.
Será mi debut en la distancia y la primera vez que corra en la capital hispalense. Una carrera que cuenta con 13.000 corredores inscritos y que está considerada una de las mejores maratones de Europa, ya que cuenta con un circuito muy rápido y un clima normalmente apacible.
El principal motivo que me hará desplazarme tantos kilómetros para correr un maratón es que por motivos laborales no puedo correr en Barcelona. Además, Sevilla tiene un maratón muy atractivo por la época del año en la que se celebra, por el clima, y por la altimetría del recorrido.
¿Y cómo llego a esta carrera?
Mal, muy mal. Os cuento…
Tras terminar la Mitja Marató Vila de Santa Pola del pasado 24 de enero todo parecía ir sobre ruedas. Habían pasado ocho semanas del específico de maratón y tan sólo me quedaban cuatro por delante. A priori las menos duras ya que la carga iba a ir bajando gradualmente.

En la Mitja Marató Vila de Santa Pola.
Durante esa semana entrené con absoluta normalidad sin tener apenas secuelas del esfuerzo realizado en dicha competición. Pero el viernes de esa semana y tras un gran entreno de series de 5000, 4000 y 3000 metros, el pie derecho se empezó a hinchar. De la noche a la mañana me había aparecido una misteriosa tendinitis del flexor del dedo gordo del pie.

Pie derecho inflamado.
Fue algo más de una semana de un calvario considerable. El dolor era muy fuerte y era imposible correr. A base de Voltaren conseguí mitigar el hinchazón y con mucho trabajo de fisioterapia y de cuidados varios el dolor se convirtió en molestia y ésta fue desapareciendo paulatinamente. En parte gracias al trabajo de Ars Salut Esportiva y su Indiba. Gran trato por su parte ya que me atendieron con carácter de urgencia, de hoy para hoy. Aprovecho para daros las gracias.

Aplicación de hielo en pie y tibial anterior.

En la elíptica y AlterG.
Pero durante este proceso estuve más de una semana salvando los entrenamientos a base de elíptica y correr en cinta sin gravedad con la tecnología AlterG, y la musculatura se resintió bastante. Acostumbrado siempre a correr me notaba bastante cargado muscularmente y eso acabó desembocando en una distensión en el isquiotibial de la pierna izquierda, el miércoles 10 de febrero, en el último entreno serio de cara a la maratón (el famoso 2x6000m). El primer 6000m salió fácil (20’39), sin problemas. Pero en el segundo al llevar ritmos más exigentes noté un latigazo que me permitió terminar el entreno con mucho dolor (20’09) pero que esa misma tarde me dejó completamente cojo sin poder caminar con normalidad.

Indiba del centro Ars Salut Esportiva de Sabadell.
Al día siguiente fui a que me diagnosticaran qué era lo que tenía, ya que yo me temía lo peor y pensaba que tenía alguna rotura. Por suerte me dijeron que tenía una distensión y me estuvieron tratando con Indiba, como ya hicieron para curar la tendinitis antes comentada.

Aplicándome infrarrojos en el maltrecho isquio izquierdo.
Estuve dos días en el dique seco, y el sábado probé de rodar suave y me molestaba bastante. El domingo más de lo mismo, no pudiendo ir más rápido que 4:15min/km, ya que si alargaba la zancada notaba muchísima tensión en el isquio como si fuera a reventarme. Mientras tanto me compré una lampara de infrarrojos para acelerar el proceso de recuperación lo máximo posible.
Visto el panorama hablé con el fisio Javi Jiménez y me convenció para tratarme con punción seca. Yo accedí porque por mucho que pudiera rodar, sino podía correr rápido no iba a ninguna parte. Quizás saneando la contractura que hizo la distensión conseguíamos solucionar el problema. La esperanza es lo último que se pierde…

Haciendo bici estática con la Training Mask simulando 2.700 metros de altura.
Tras realizarme la punción seca el lunes, estuve dos días haciendo bici estática sin carga para no perder la forma excesivamente. El miércoles, hace tan sólo dos días, probé a rodar y me hundí. Sólo fui capaz de empezar rodando a 6:00 min/km y no pude bajar ni de 5:15 min/km. Realicé 30 minutos de rodaje y unos estiramientos y pasé uno de los momentos más duros que he vivido como corredor. Hablé con Javi, mi fisio, él me dijo que era una reacción normal y que la punción seca tiene un proceso y que todavía era temprano para valorar. Yo le dije que tiraba la toalla, que lo dejaba estar. Momentos realmente duros.
Durante la tarde me fui haciendo a la idea de empezar a preparar el resto de la temporada, ya poniendo vistas al próximo 10k donde intentar asaltar los 32 minutos. Ya estaba mentalizado de ir a Sevilla a acompañar a mi hermano Javi y ver a amigos y conocidos que la van a correr. No iba a dejar tirado a mi hermano y aunque fuese duro lo iba a acompañar. Si empezamos en esto juntos teníamos que terminarlo juntos, aunque no del modo que yo me hubiese imaginado.

En la última tirada de 30k con mi hermano Javi.
Esa misma tarde fui a hacerme un masaje de descarga planificado con Jordi Solano de BCN Sports Recovery. Con él me descargué psicológicamente un poco, ya que además de hacer grandes masajes también hace y ha hecho deporte y me pudo entender mejor. Nunca mejor dicho me realizó un masaje de descarga en ambos sentidos; en el físico y en el psicológico.
Después del masaje fui a ver, por fin, la película de Creed de mi tan amado Silvestre Stallone. Casualidades de la vida así estaba planificada una quedada con mis hermanos y quizás fue en el mejor momento posible. Durante la película recapacité y pensé que fuera paso a paso, día a día, y que tomara la decisión en el último momento. No tenía nada que perder, el viaje estaba pagado e iba a ir de todas formas a Sevilla.

En el cine con mis hermanos.
Así pues decidí ayer jueves salir a rodar por la tarde. Me dije que si era capaz de rodar por debajo de 4:00 min/km, me daría otra oportunidad para acabarlo de decidir mañana sábado por la mañana. Empecé a rodar y me noté cargado, pero ni mucho menos lo que sentí tan sólo 24 horas antes. Sin miedo a nada empecé a progresar y progresar hasta acabar haciendo un último kilómetro a 3:40 min/km, haciendo un total de 40 minutos y nueve kilómetros de rodaje. Decidí no forzar más ya que con eso me era suficiente.
Con todo lo acontecido aún no sé si correré el domingo. Hoy me lo he dado de descanso y mañana sábado, a primera hora, decidiré qué hacer tras un rodaje y unas rectas de activación. Sino noto molestias me pondré en la línea de salida. Si duele, lo dejaré estar definitivamente.
¿Y con todo esto, qué pido para el domingo?
Si finalmente puedo correr he decidido que lo haré junto a mi hermano hasta donde mi isquio izquierdo aguante. A la que me duela en exceso o note cualquier sensación fuera de lo normal, me retiraré para evitar males mayores.
Mi idea era salir a un ritmo más elevado, pero creo que el que mi hermano quiere llevar está sobradamente bien para la situación en la que me encuentro. Además, es el debut en la distancia y quiero disfrutarla con él. Ya vendrán más para poder correrlas al 100%.
No sé si lo conseguiré, lo que sí os puedo decir es que lo he intentado de mil formas para poder estar el domingo en la línea de salida. No tengo nada que reprocharme y creo que no he fallado en la planificación, sino que en este deporte dependes de muchos factores externos y es muy difícil tenerlo todo controlado. ¿Cuántos atletas han renunciado por lesión a correr mañana? Ahora mismo tengo a unos cuantos en la cabeza. Las lesiones forman parte del deporte y es algo con lo que debemos lidiar todos los deportistas.
De no ser por la lesión llegaba en el mejor momento de forma posible, y es una verdadera lástima no poder estar en buenas condiciones para el domingo. Es por eso que voy a ir a disfrutar del ambiente del maratón, de todo lo que rodea esta mítica prueba, y hasta donde mis piernas me lleven.
De esta preparación me quedo con lo muchísimo que he disfrutado durante las primeras nueve semanas del específico, con las grandes sensaciones en los entrenamientos, con mis dos mejores marcas en 10k, con mi mejor marca en media maratón, y también me quedo con toda esa gente que me ha apoyado incondicionalmente hasta el último día. Si estoy con opciones de correr el domingo también es por vosotros.
Gracias a Javi Jiménez por la ayuda; siempre me sacas de los marrones más grandes y estoy seguro que de éste, con un poco más de tiempo, me hubieses sacado. A Carlos Carbonell por sus masajes, amabilidad, ofrecimiento y cercanía, y a Jordi Solano por ayudarme a estar apunto semana tras semana, y por otras tantas ideas y consejos que me da. Sin olvidarme de su compañero Jesús, que hoy me realizó un vendaje en el maltrecho isquiotibial.
No quiero olvidarme del grupo «Quedada Running» de Whatsapp. Hemos tirado del carro y el maratón ya lo tenemos aquí. ¡Vamos con todo!
Agradecimientos también a Weapon To Win por seguir confiando en mí.
Ya os contaré qué tal sale el domingo.
¡Un saludo a tod@s!
Un comentario en “Sensaciones previas Maratón de Sevilla (21/02/2016)”